- Prevención y no reacción ante los accidentes y/o ausentismo laboral (un trabajador accidentado es un trabajador menos).
- Proteger a la empresa de potenciales multas y/o demandas laborales, construyendo una base legal ante una eventualidad.
- Asegurar que pagues la tasa de cotización que corresponde a la mutualidad afiliada, sacando el mayor provecho de esta.
- Entrega de recomendaciones sobre las instalaciones que permiten mitigar los riesgos de accidentes y enfermedades profesionales.
- Ahorrarse el prevencionista de riesgos, siendo este un trabajador con una labor ajena a la actividad principal de la empresa, se hace difícil controlar la productividad y asegurar que tenga todo de acuerdo a las normativas vigentes.
